17 de noviembre 2022 | Devoción Matutina para Adolescentes 2022 | El banco de mil millones de dólares

«¡No me des pobreza ni riqueza! Dame solo lo suficiente para satisfacer mis necesidades. Pues si me hago rico, podría negarte y decir: «¿Quién es el Señor?». Y si soy demasiado pobre, podría robar y así ofender el santo nombre de Dios» (Proverbios 30:8, 9, NTV).

En este día de 1919, el National City Bank de la ciudad de Nueva York informó de que sus activos ascendían a 1,000 millones de dólares (unos 40,000 millones de hoy). Eso fue hace mucho tiempo, y mucha gente ha ganado esa cantidad de dinero por sí misma desde entonces.
Bill Gates es uno de ellos. Gates es un magnate de los negocios, filántropo, autor y ex presidente de Microsoft, una empresa de software informático. Es una de las personas más ricas del mundo. En 2021 tenía un valor de 127,300 millones de dólares y es uno de los multimillonarios más exitosos de todos los tiempos. Él y sus compañeros de Microsoft y Apple lanzaron casi solos la revolución de las computadoras personales.
Gates vale miles de millones, pero incluso 1,000 millones de dólares es mucho.
¿Cuánto son exactamente 1,000 millones de dólares? Bueno, si contáramos billetes de 10 dólares, uno por segundo, veinticuatro horas al día, siete días a la semana, tardaríamos más de tres años en contar 1,000 millones de dólares.
Una pila de mil millones de billetes de 1 dólar se alzaría más de 320 kilómetros [200 millas] hacia el cielo.
Si gastaras 100,000 dólares al día, tardarías 27 años en gastar 1,000 millones.
Entonces, ¿qué harías si tuvieras 1,000 millones de dólares? ¿Qué podrías hacer? A 20 dólares la hora, podrías contratar a 1,000 trabajadores de construcción durante 25 años para construir iglesias en todo el mundo. Eso es lo que 1,000 millones de dólares podrían hacer. Podrías pagar los alimentos necesarios para alimentar a 100,000 personas sin hogar, los 365 días del año, durante 30 años.
Eso es lo que podrían hacer 1,000 millones de dólares. Podrías pagar la impresión de una Biblia para cada hombre, mujer y niño en Brasil, Pakistán, Nigeria, Rusia, Japón, México, Egipto y Argentina. Eso es lo que 1,000 millones de dólares podrían hacer.
Pero tener demasiado dinero también puede ser malo, por eso no tiene sentido acumular demasiado. El exceso de dinero puede hacernos olvidar nuestra necesidad de Dios. ¿Por qué no dejas que Jesús se encargue hoy de todos tus problemas económicos?

DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADOLESCENTES 2022



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