10 de noviembre 2025 | Devoción Matutina para Adultos 2025 | «No teman»
NOVIEMBRE: FRENTE AL DOLOR
«Tengan ánimo. […] No teman» (Mateo 14: 27, RVA15).
El miedo es una emoción muy común que nos acompaña del nacimiento a la muerte. Como mecanismo de defensa en un mundo peligroso, compartimos esta realidad con muchas otras especies del reino animal: cuando intuimos la presencia de un peligro, el miedo nos impulsa a intentar evitarlo, a escondernos, a atacar o a huir, según los casos.
La Biblia nos dice que el miedo es una consecuencia inmediata del pecado. Nada más pecar, Adán se esconde de Dios, diciendo: «Oí tu voz en el huerto y tuve miedo, porque estaba desnudo; por eso me escondí» (Gén. 3: 10). Aunque no conocía la Biblia, Aristóteles también define el miedo como «una expresión del mal». Sus compatriotas paganos veían en el miedo un castigo de los dioses, y personificaron al temor con el demonio Deimos y al miedo con Fobos (que los romanos llamaron Pallor y Pavor, respectivamente).
El arma más poderosa de que dispone el enemigo no es la fuerza. Eso lo saben muy bien todos los poderosos. Para controlar y someter a las personas basta con el miedo.
Ante el miedo transmitido con una amenaza, los individuos solemos doblegarnos como si ya nos hubieran atacado. Hasta el punto de que, en una alarma de incendio, por ejemplo, el miedo puede causar más daños que la catástrofe en sí.
El pasaje de hoy nos sitúa en la barca de los discípulos en medio de una tormenta.
El miedo les hace ver hasta lo que no existe, les hace ver un fantasma en su propio maestro. Por eso Jesús insiste: «No tengan miedo. Soy yo».
El miedo nubla nuestra razón, nos encierra en nuestro pánico, pone en primer lugar nuestra propia supervivencia personal, al grito de ¡sálvese quien pueda! Y al ir cada uno a lo suyo, crece la pandemia de individualismo, insolidaridad y egoísmo.
Todo esto es contrario al mensaje del evangelio que es, precisamente, la solidaridad.
Por eso Pablo anima a sus lectores diciendo: «Dios no nos ha dado un espíritu de temor, sino un espíritu de poder, de amor y de buen juicio» (2 Tim. 1: 7, DHH).
En medio de nuestros problemas Jesús se nos acerca y nos dice que recobremos el ánimo, que no nos dejemos aterrorizar por presuntos «fantasmas». Porque, aun en medio de la peor tormenta, él está a nuestro lado aunque la oscuridad no nos permita verlo. Él tiene poder para sosegar nuestras tempestades y tranquilizar nuestros corazones. Por muy bravo que se ponga el mar, su amor calmará la tempestad y nos traerá bonanza.
========================
DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADULTOS 2025
- 10 de noviembre 2025 | Devoción Matutina para Adultos 2025 | «No teman»
- 10 de noviembre 2025 | Devoción Matutina para Jóvenes 2025 | Una flor que se adapta
- 10 de noviembre 2025 | Devoción Matutina para Damas 2025 | Tras grandes ataques, grandes victorias
- 10 de noviembre 2025 | Devoción Matutina para Adolescentes 2025 | Descubrimientos impagables
- 10 de noviembre 2025 | Devoción Matutina para Menores 2025 | Un paseo después de la lluvia
(187)
