1 de enero 2023 | Devoción Matutina para Menores 2023 | El soplo marca la diferencia
«Dios el Señor formó al hombre de la tierra misma, y sopló en su nariz y le dio vida. Así el hombre se convirtió en un ser viviente» (Génesis 2: 7).
Dios fue el primer artesano. Usó el barro para crear al hombre. A diferencia de todo lo demás que trajo a la existencia con su voz, a Adán lo formó con sus propias manos. Dios casi había terminado su obra, ya que Adán tenía ojos, oídos y pies; pero, no veía, ni oía, ni caminaba. Era como un muñeco, insensible. En ese momento, Dios parecía ser como cualquier artesano que modela diferentes utensilios de barro. Sin embargo, manifestó su poder cuando sopló en la nariz de Adán el aliento de vida; eso marcó la diferencia sobre cualquier artesano. Solamente él puede impartir vida.
A causa de la desobediencia de Adán y Eva, ahora nosotros vivimos transitoriamente, nuestra vida es corta y tenemos muchas dificultades. La buena noticia es que Dios quiere darnos una vida eterna y tiene el poder para concedérnosla, así como hizo con Adán mediante el soplo.
Después de que Jesús resucitara, los discípulos todavía estaban atemorizados, escondidos y con poca fe; pero, de repente, Jesús apareció y los animó, además: «Sopló sobre ellos, y les dijo: «Reciban el Espíritu Santo»» (Juan 20: 22). Ese soplo marcó la diferencia para que ese mismo grupo se convirtiera en un grupo de discípulos audaz, fervoroso, valiente y dispuesto a hablar del amor de Jesús manifestado en la cruz.
Sin Jesús somos como Adán sin el soplo, solo barro; tenemos corazón, pero no podemos amar al prójimo; ojos, pero no leemos la Biblia; oídos, pero nos incomoda escuchar una predicación; pies, pero somos incapaces de servir a los demás. Sin embargo, así como ocurrió con Adán, Dios se coloca a nuestro nivel porque quiere soplarnos su vida. Al igual que les sucedió a los discípulos, el Maestro de Galilea quiere soplarnos su poder para que vivamos felizmente. El soplo de Dios es el Espíritu Santo, que viene como un viento fresco que nos limpia, nos renueva, nos fortalece y nos transforma. Recíbelo hoy, mañana y cada día, para que vivas la auténtica vida que Dios desea para ti.
DEVOCIÓN MATUTINA PARA MENORES 2023
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